Ayer por la tarde, el Estadio Olímpico de Londres fue testigo de una serie de resultados sorprendentes en atletismo, comenzando por el bronce de Yelena Isinbayeva. La atleta rusa, campeona olímpica en Atenas 2004 y Pequín 2008, partió como la gran favorita en la final de salto de pértiga, pero tuvo que contentarse con el tercer escalón del podio, en una competición que además estuvo condicionada por la lluvia y el viento y que vio triunfadora a la norteamericana Jennifer Suhr, que saltó 4,75 m, por delante de la cubana Yarisley Silva. Otra sorpresa se tuvo en la final de los 400 m vallas, con el dominicano de 34 años Félix Sánchez, quien, a ocho años de distancia del oro de Atenas 2004, con la victoria de ayer se ha convertido en el atleta de mayor edad ganador de una prueba de velocidad en las olimpiadas. Por detrás de éste se colocaron el norteamericano Michael Tinsley y el puertorriqueño Javier Culson, el favorito antes de la prueba. Otra sorpresa de la tarde fue la medalla de oro conseguida por la bielorrusa Nadzeya Ostapchuk en el lanzamiento de peso, con un lanzamiento de 21,36 m. La favorita, la neozelandesa Valerie Adams, campeona olímpica en Pequín 2008 y mundial en Berlín 2009 y Daegu 2011, tuvo que contentarse con la medalla de plata, mientras que la de bronce la obtuvo la rusa Yevgeniya Kolodko. Pronóstico acertado en cambio en los 3.000 m obstáculos, con la campeona mundial actual, la rusa Yuliya Zaripova, medalla de oro con un tiempo de 9:06.72. La de plata la obtuvo la tunecina Habiba Ghribi y la de bronce la etíope Sofia Assefa. También el favorito de los 400 m, el campeón mundial de Daegu 2001 Kirani James, no defraudó las expectativas, ganando con solo 19 años su primer oro olímpico. Concluyó con 43.94, por delante del dominicano Luguelin Santos y del atleta de Trinidad y Tobago Lalonde Gordon.